viernes, 14 de mayo de 2010

Los jueces se llevan mal

Cerrajero

Parece que los jueces se llevan mal entre ellos. Cuando se pelean los funcionarios entre sí, el corporativismo se fractura y los ciudadanos salen ganando. A lo mejor de estas peleas salimos todos más iguales ante la ley.
 Los poderes tradicionales han sufrido una reconversión brutal azotados por el ventarrón del "igualitarismo ciego", hoy no se ven uniformes militares nada más que en los desfiles y cuando la ministra visita los diversos frentes de compasivo merengue en los que repartimos balas y besos. Y los obispos desde que van a las manis con gorrillas de bateadores de besibol, no son lo que eran. Pero los jueces, no. Recordad la rapada soberbia del juez del caso del 11M. Que se peleen. Así se debilita la jaula de hierro burocrática de la que hablaba Weber, y nosotros nos movemos más holgados.
En estos casos, inmediatamente hay que alinearse, tomar partido, firmar manifiestos. Los intereses personales de Garzón, han coincidido en multitud de casos con los míos y con los de mucha gente. Pero si me huelo que un funcionario empieza a sentirse imprescindible y lo veo convencido de que a veces los procedimientos pueden ser amoldados al gusto porque hay un bien superior que proteger, bien del que él es el administrador y que conoce mejor que otros, tiemblo. Y me da por pensar que, en este caso, los legítimos intereses particulares del burócrata no se compaginan con mis legítimas y particulares aspiraciones. En estas cosas no se puede actuar por agradecimiento. No estamos hablando de ciudadanos particulares. Estoy a ver en que queda lo de las escuchas del caso Gürtel. Hay algo que está, incluso, por encima de Garzón que es el derecho a no ser vigilado por el Estado, nada más que en ciertas ocasiones, limitadas y estrictamente regladas. Esto es lo que no tengo claro en el caso Gürtel. Que los partidos sacan dinero de debajo de los cimientos de las urbanizaciones, no me cabe la menor duda. 
Y del imprescindible resarcimiento de las víctimas, y de sus familias, del golpe militar de Franco ya se deberían de haber ocupado los gobiernos democráticos. Todavía puede hacerlo el Gobierno actual, de una vez y para siempre y no dejarlo en manos de ningún juez, que no le corresponde.

8 comentarios:

  1. Don Pablo, da gusto leerlo. Siga usted por la senda bloguera que nos produce mucha satisfacción aprender de usted.

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  2. Iria, muchas gracias, ya sabes, a amigo que huye, jaula de plata.

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  3. Querido Pablo, he leído detenidamente tu post, y aún estando en muchas cosas de acuerdo contigo, por no decir la mayoría, no puedo dejar de sentir indignación por lo que está ocurriendo. Será un hombre ambicioso, será vengativo, como dicen muchos, no habrá procedido adecuadamente( ya le han quitado algunas competencias por ello), pero me subleva el hecho de que sea una vez mas la derecha montaráz ( por mas señas la Falange y otras yerbas..) la que en nombre de los valores democráticos, que jamás han practicado, pero si aprovechado, cuando les conviene, vayan a sentar en el banquillo a un hombre que ha luchado tanto por los derechos humanos, derechos que ellos han pisoteado constantemente. Siempre me ha repugnado la doble moral, la doble vara de medir que en este país se practica tanto, en nombre de la religión, unas veces, y en nombre de otras .

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  4. Querida Petra, no podemos pedir que nuestros enemigos aplaudan nuestros errores. Los aprovecharán para molestarnos. Recuerdo que el poeta y catedrático Luis García Montero, en su lucha con su compañero de Departamento, Fortes, se equivocó al insultarlo en una reunión de Departamento y en un artículo publicado en EL PAIS de Andalucía. Fortes lo denunció por calumnias e injurias y gano el juicio. Perdió Montero y también los que analizamos el fenómeno Fortes como una muestra de la ineptitud de la Universidad para seleccionar a su profesorado. No solamente hay que ser mejor que los otros, además hay que hurtarles la yugular para que no muerdan. Porque ahora no sólo pierde Garzón, sino todos los que hemos estado de acuerdo con él en tantas ocasiones.

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  5. Mi querido Pablo: En este tema de la Memoria Histórica, la impunidad del franquismo o caso Garzón, que todo se entremezcla un poco, me es muy difícil ser breve, y aún menos florido, como me gusta ser en estas entradas. Así que iré a lo que creo fundamental y quizá algo obviado u oculto entre el follaje del asunto. El caso es que, la semana pasada, el diario PUBLICO ofreció a sus lectores un librito con los dos autos de Garzón sobre los desaparecidos entre el 36 y el 51 (con prólogo de Jimenez Villarejo). Al leer dichos autos, me doy cuenta que es la primera vez que el Estado -en este caso, a través del Poder Judicial, en la figura del juez Baltasar Garzón- pone por escrito lo que tantos historiadores vienen diciendo hace años: que el terror franquista fue brutal, despiadado, extenso e intenso, que incluyó todo tipo de aberraciones y que fue planificado y con objetivo de exterminio y que todo aquello tuvo responsables, con nombres y apellidos. Leer los autos y la profusión de notas y citas que los sustentan, son un verdadero placer -dentro de la desgracia de los hechos que narran- y es lo que a mi me ha hecho indignarme, entristecerme y firmar todo tipo de manifiestos a favor del Juez. Lo que ahí escribió es un homenaje increible en este país de m....que aún sigue sin dedicar calles y plazas a los defensores de la democracia y si a los asesinos (Queipo de Llano sigue custodiado en la Macarena de Sevilla, cuyo mantenimiento y sueldos respectivos se pagan con mis impuestos, por ejemplo). Es decir, Garzón es la primera esperanza concreta de sacar a la luz, con ayuda del Estado, la barbarie desenfrenada de falangistas, militares y cómplices de todo tipo. Que él, además, ha hecho cosas cuestionables antes, si, que es muy medíatico, si, que nos vamos a sentir más libres y menos enjaulados con su procesamiento, no. Los guardianes de la jaula saben muy bien a quién le darán más libertad de movimientos (a Falange, a la Gurtel) y a quien menos (las asociaciones de la Memoria o, por qué no, a quien convoque manifestaciones o huelgas). Salud y República!! Fuera jueces fascistas de las instituciones. Ah,y besos, que hoy es sábado...

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  6. Corleone, la responsabilidad del Gobierno: que la esperanza que tenían las víctimas del franquismo de que un gobierno democrático y socialista, restañara sus heridas se haya venido frustrando desde 1982. La de Garzón, al que hay que agradecer que vierta en sus autos el relato de los hechos tal como lo vienen haciendo algunos historiadores en sus libros, que no haya medido bien sus fuerzas y las de las leyes que los legisladores han puesto en sus manos. Ahora que de nuevo la brutalidad y el salvajismo, espoleados por la crisis, acechan a la convivencia, la igualdad ante la Ley y la fuerza de la Ley, aunque pequeño burguesa, es la última esperanza. Me molesta que un hombre que pega a su mujer tenga más pena que una mujer que pega a su hombre, me molesta la discriminación positiva. El principio: todos somos iguales ante la Ley está por encima de jueces y de deudas histórica. Si lo ponemos en duda con actuaciones discutibles, que aprovechan los enemigos que no son tontos, le estamos haciendo un flaco servicio a la Igualdad y a la Justicia.

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  7. Magníficos todos los comentarios!
    Es tristísimo que tengamos un Gobierno de medias tintas: Ley de la Memoria histórica que no aplica, la Iglesia campando por sus respetos y el Gobierno sin atreverse a nada, por no hablar de las medidas para paliar la crisis ¿se creían que se solucionaba dejando pasar el tiempo?
    Pero volvamos a la despiadada represión franquista: hoy precisamente he hecho mi buena obra del día dedicando parte de la tarde a convencer a un joven del derecho que tienen los descendientes de los que yacen en las fosas a enterrarlos humanamente: Él esgrimía los argumentos de la derecha -que después de tantos años por qué no olvidan ya, etc.- yo le conté el caso de otro querido muchacho de su edad que desea rescatar del olvido, del anonimato y del horror a su bisabuelo; en fin, que he llegado a convencerlo de cómo los "caídos por Dios y por España" han tenido la dignidad de sus tumbas y aun de que figurasen sus nombres en las fachadas de las iglesias y los vencidos son todavía hoy "desaparecidos". La necesidad de las familias de enterrar a sus muertos debe ser ancestral: Antígona se labra su desgracia y muere enterrada viva en castigo por intentar enterrar a su hermano Polinices, que luchó en contra del tirano.
    Me interesa ahora leer el librito del que habla Corleone, aunque en las últimas semanas me conmovió la novela de Muñoz Molina "La noche de los tiempos", que trata del horror de la sublevación del 36 en Madrid -aunque en algunos aspectos me parece discutible y me gustaría hablar con alguien que la haya leído- y ahora voy leyendo por la mitad "Hijos del árbol milenario" de Mª Jesús Orbegozo que comienza con la guerra y posguerra en Euzkadi y creo que termina en el 79: terrible y realista descripción del frente y de la represión. Os las recomiendo.
    A pesar de los errores que haya cometido estoy con Garzón.

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  8. “Hay venganzas, luchas de poder
    que al final se llevan todo por delante”,
    afirma el juez José Ricardo, en EL PAIS del 16/05/10, de Prada a propósito del derribo
    de Baltasar Garzón, compañero
    suyo en la Audiencia. “Lo que se
    siente en estos casos es la profunda
    capacidad de causar injusticia
    que tiene la justicia”.

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