jueves, 26 de abril de 2012

Nos han crecido las chinitas



Me tengo que hacer mirar mi manía de oír ciertas emisoras y de ver, o dormir, “Amar en tiempos revueltos”. Yo me digo que es para saber por dónde van las cosas y me doy aires de sociólogo y de antropólogo a la violeta, pero eso no lo explica todo. Cuando vivía mi madre, me leía el ¡Hola! en su casa y tenía en la mía la revista Triunfo, ninguno de mis amigos supo jamás de dónde sacaba yo la información sobre Lola Flores y el Pescaílla, tan necesaria para entender los cambios experimentados por la sociedad española en los últimos 50 años. Lo inconfesable es que hubo veces que me interesaba más lo que escribía Peñafiel que los lúcidos análisis de Vázquez Montalbán. Cuando Losantos dirigía el informativo “La mañana de la COPE”, en más de una ocasión, y para espabilarme,  sintonizaba la emisora católica. Me resultaba imposible seguir durmiendo después de oír a un tertuliano de esa emisora decir que “los chinos son raros, yo no me fiaría mucho de lo que dicen los chinos, porque son una cultura rara, los chinos son raros, se les entiende poco… Lo de que son sabios, pues, tampoco les ha ido tan bien, nos venden esto de que las culturas orientales son sapientísimas, pero luego en realidad tienen cada cosa que es para tirarse de los pelos,  yo soy muy occidental, ¿qué le vamos a hacer ?”.  Pero la COPE ya no es la de Losantos, que también llamaba moritos a los marroquíes. Menos mal que nos queda el Senado donde la ministra de Empleo, Báñez, ha contestado a un senador socialista que acusaba al Gobierno de poner en marcha un marco laboral de “estilo asiático”: “Lo único asiático que hay aquí son las chinitas que ponen los socialistas en el camino del Gobierno”.  ¿No sabe  Báñez que las chinitas han crecido y los negritos y los moritos y, también, los indios que encontraron a su llegada al Nuevo Mundo los emigrantes castellanos, esos que nuestras historias llaman Conquistadores.  Se han hecho mayores y han roto las huchas del DOMUND. No todo el mundo lleva bien que los chinitos sean hoy más ricos que nosotros, que los moritos se nos hayan cabreado y que los negritos hayan inventado el jazz y el gospell. Y hay quien no soporta que un negro sea presidente de los EEUU y, menos,  que un indio aymará presida Bolivia. ¡Qué buenos los tiempos de la colonia! Con tánto que exterminar, que convertir y que civilizar y, sobre todo, que vestir. Porque, nos pongamos como nos pongamos, los indígenas iban muy mal desvestidos. Y luego, cuando han decidido ir de tiendas, parece que se lo compran todo en un chinois. Por lo menos que se pasen por Zara.

4 comentarios:

  1. A mi tu texto y lo que en él apuntas me ha hecho pensar (quizá desordenadamente) en el extraordinario libro Naufragios, de Alvar Núñez Cabeza de Vaca.
    Creo que volver a los clásicos aclara mucho las ideas, porque ahí están para disfrutarlos y criticarlos, pero también gracias a ellos recibimos una crítica de nuestro propio presente.
    Aquí dejo un fragmento:
    "Y llegamos a un pueblo de hasta veinte casas, adonde nos recibieron llorando con grande tristeza, porque sabían ya que adonde quiera que llegábamos eran todos saqueados y robados de los que nos acompañaban, y como nos vieron solos perdieron el miedo, y diéronnos tunas, y no otra cosa ninguna. Estuvimos allí aquella noche, y al alba los indios que nos habían dejado el día pasado dieron en sus casas, y como les tomaron descuidados y seguros, tomáronles cuanto tenían, sin que tuviesen lugar donde esconder ninguna cosa; de que ellos lloraron mucho; y los robadores para consolarles, los decían que éramos hijos del Sol , y que teníamos poder para sanar los enfermos y para matarlos, y otras mentiras aun mayores que éstas, como ellos las sabían mejor hacer cuando sienten que les conviene; y dijéronles que nos llevasen con mucho acatamiento, y tuviesen cuidado de no enojarnos de ninguna cosa, y que nos diesen todo cuanto tenían, y procurasen de llevarnos donde había mucha gente, y que donde llegásemos robasen ellos y saqueasen lo que los otros tenían , porque así era la costumbre."
    Gracias y saludos.

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  2. El texto de Cabeza de Vaca debe ocupar un puesto de privilegio en la historia universal de la infamia. La mentira aliada siempre con el horror.Me ha sorprendido, porque no lo conocía, trasindependiente, que los invasores dijeran actuar en nombre del Dios del Sol. Yo tenía entendido que la justificación que exhibían para cometer tanto crimen era la cristianización del Nuevo Mundo. Pero les arrebataron el oro y las vidas, en nombre de sus propios dioses. Gracias. Un saludo cordial

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  3. D. Pablo, como le llamaba en clase hace algo más de dos o tres años (IES. Diego de Siloe). Es un placer volver a leer algo escrito por usted. Ahora tengo la oportunidad de agradecerle sus clases (análisis de canciones de Mecano, comentarios sobre artículos del ¡Hola¡...) realmente eran muy divertidas que han dejado en mi el gusto por la lectura y unas anécdotas maravillosas que contarle a mis hijas. Seguiré sus artículos.
    Un saludo.
    María

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  4. María, tengo un estupendo recuerdo del Diego de Siloé y sobre todo de las alumnas y alumnos del Instituto. Me sentía útil porque advertía en vosotros unos deseos grandes de aprender y de mejorar. Recuerdo cosas de entonces emocionantes y curiosas. Si quieres que intercambiemos nostalgias,escríbeme a esta dirección: coleraquiles@gmail.com, me gustaría conocer tus apellidos y saber qué años te di clase. Un saludo muy cordial.

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