domingo, 15 de agosto de 2010

En la COPE se estudia el tiranicidio

Acueducto de pesadilla
A principios de mes, Pánfilo estuvo unos días en Segovia invitado por una buena amiga desde cuya casa se ve un trozo del Acueducto. El último día de estancia, antes de acostarse, le preguntó a su amiga lo mismo de todos los años: “Enriqueta, ¿y nunca se le ha caído encima a un segoviano una de esas piedras ? “. Ella contestó con la misma palabra de otros años: “Jamás”. Pero Pánfilo se fue a la cama dándole vueltas a la inestabilidad del monumento y a los daños irreparables que sufrirían la Historia del Arte, el comercio segoviano y algún turista desafortunado si el monumento se derrumbara de repente. No durmió bien. Tuvo pesadillas, ya no era el monumento el  que saltaba hecho añicos, sino la propia España. Porque en ciertos lugares de Castilla -nuestro Pánfilo lo tiene comprobado-,  el slogan “España se rompe”, surge debajo de cualquier piedra y más de las milenarias. En un momento de lucidez se preguntó si habría alguna piedra que tuviese menos de mil años. Sobre las tres de la mañana puso la COPE, que se oye muy bien en esa ciudad, donde sólo se sintonizan siete emisoras, entre ellas Radio María, y escuchó cómo un periodista hablaba del derecho de los pueblos a acabar con los tiranos. El hombre fundamentó el tiranicidio en textos clásicos y de Concilios. Pánfilo estaba entretenido con aquella clase de compasiva Historia Sagrada, nada que ver con las confesiones de una anciana en la SER que había estado enamorada en su juventud del tenor Mario Lanza, pero  sobre las 3:45 el locutor afirmó que el tirano con el que había que acabar era Zapatero y se desveló. Pensó en llamar a los GEOS, y lo hubiera hecho de no ser porque el vengativo historiador de la noche, sobre las cuatro menos cinco, dio a entender  que quizá no habría que eliminarlo físicamente, y en ese momento  Pánfilo comenzó a coger el sueño de nuevo, más tranquilo;  medio dormido creyó  oír que se contentaba con "botarlo". La conmutación de la pena de muerte lo sumió en un dulce sopor que se convirtió en sueño profundo gracias al  primer misterio gozoso del  Santo Rosario que una monjas de voz acariciadora comenzaron a desgranar inmediatamente después de las noticias de las cuatro en Radio María.

5 comentarios:

  1. Enriqueta no te dijo la verdad, ella guarda una piedra caida del acueducto...

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  2. Si es que tenía que pasar. ¿A quién se le ocurre hacer un acueducto tan grande sin mezcla?

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  3. La gravedad del caso me ha obligado a ponerme en contacto con Pánfilo que ha confirmado lo que se dice en el post y además ha precisado la fecha: madrugada del 11 de agosto. También se planteó en el programa el espinoso tema de qué hacer cuando los políticos se saltan la "Ley natural". El conductor del programa afirmó en algún momento que el régimen de Franco era un estado de derecho.

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  4. Pablo, no son horas. Es que hay que ver a lo que te dedicas a tan altas horas de la noche y encima en Segovia. Para una vez que va uno a Segovia, cómo obviar los cochinillos y cosas por el estilo. Que no, Pablo, de verdad que no. Yo quisiera poder aprobar tu comportamiento, pero me veo en la obligación de censurarte duramente y reclamarte con fuerza que a ver si aprendes, coño. Un abrazo

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  5. Precisamente creo, Antonio, que fue una fuerte ingesta de cochinillo lo que desveló a Pánfilo, porque no parece posible ni que España se rompa, al menos en nuestros días, ni que el Acueducto se caiga. Y los dueños de la COPE, los pobres, es que añoran cuando el único púlpito era el suyo y suben la voz como Belén Esteban a ver si se les oye. Y lo hacen si cambiar de cara, sin operarse de nada. A pecho descubierto y con las mismas monsergas de cuando se montaron en el carro del Generalísimo. Podían buscarse un cirujano plástico.

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