sábado, 13 de diciembre de 2014

Educación para la pastelería

Educando en valores
En esta época en la tertulias se habla sobre qué tipo de juguetes hay que regalar a los niños, sobre el sexismo en el juguete, las muñecas, las pistolas, los cañones, las barbies y todas esas puñetitas.  Se parte para el debate de que según el Observatorio Andaluz de la Publicidad No Sexista, el 81 por ciento de los anuncios de juguetes analizados, tienen algún matiz sexista. Y un pedagogo insiste en que hay que educar en valores para acabar con esta lacra.  Si quieres quedar bien, te tienes que pronunciar porque los juguetes sean los mismos para niños y niñas. Una tertuliana se queja de que los padres siguen regalando muñecas a las niñas y pistolas a las niñas. Porque parece que los niños, si hablamos de los niños, hasta que no entran en alguna cofradía de Semana Santa no comienzan a jugar en serio a las muñecas. Las muñecas se siguen regalando a las niñas, que ya tendrán ocasión de mayores de alistarse en el ejército e ir a algún lugar del mundo, con sus fusilitos y sus “mataflus”, a acabar con todo lo que se mueve, o a morir ellas mismas, en alguna guerripaz tope de gama. Los juguetes, hoy en día, ni educan ni dejan de educar “en valores”. Bastante tienen los chiquillos con quitárselos de encima, para que no los aplasten. Los valores los aprenden, viendo como un encapuchado le corta el cuello a un rehén, en la tele. O en las reuniones que la thermomix celebra con sus clientes en Navidad para enseñarles a elaborar platos propios de esta fiesta. Asistí a una (65 mujeres, 7 hombres 4 niños y 4 niñas, acompañando a sus padres) y observé la atención que los chiquillos prestaban a la evoluciones del aparato. En esta clase de educación para la pastelería, algunos padres les compraron una thermomix de juguete que lo hace todo menos calentar el agua para que no se quemen los niños/niñas. La marca alemana que fabrica este robot de cocina se asegura así la clientela. Hasta les hizo a los pequeños/pequeñas unas galletas con un agujero para que las cuelguen del árbol de Navidad. El valor de una buena educación.
Para oírlo pinche  AQUÍ

5 comentarios:

  1. "en valores" jaja. En dos días he oído un montón de veces "en valores". Me da igual lo que quieran decir con eso; el presidente del Gobierno o un profesor de cualquier facultad. Cuando cogen un latiguillo nos marean. A mi lo que más me horroriza es que nos cuelguen etiquetas.

    Me encanta leerle y oírle...tiene usted una ironía muy fina.
    Saludos.

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  2. Lo de la guerripaz me ha llevado hasta el mareo con su humor, negrura y realismo. Creo que las actuales "dedes" (democracias defuncionadas) podrían hacer un buen bollo con la levadura de tu palabra.

    Gracias y saludos.

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    1. Ser levadura, por mi apego a la Biblia, es una de mis aspiraciones, amigo Independiente Trashumante. Gracias por tus jugosos comentarios. Un saludo cordial.

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  3. Marián, muchísimas gracias por leer mis entradas. Es usted muy generosa. Un saludo cordial.

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  4. Realmente interesante. Como decía Galbraith: "para manipular eficazmente a la gente hay que hacer creer a todos que nadie les manipula"...

    Saludos

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